Carlos Montilla

¿Te estás preguntando si deberías emprender en solitario o hacerlo con socios?

En este post compartiré experiencias reales, tanto las nuestras como las de otros compañeros de dentro y fuera del gremio de la arquitectura.

Y es que, hace un tiempo, Romina Andrea, me enviaba la siguiente cuestión:

“Muchas veces me pregunto si conviene realmente asociarse con alguien, o si es mejor ser la cabeza del estudio e ir subcontratando colaboradores de manera esporádica. ¿Pueden dos personas llevar un estudio conjuntamente?”

El artículo de hoy es mi respuesta a su pregunta.

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Una historia real: Asociarte con tu mejor amigo de la escuela de arquitectura

Atento a la siguiente historia:

Hace 10 años, dos grandes amigos de la universidad, Armando y Juan, estaban bebiendo alegremente en un bar cuando nació una idea legendaria: montar su propio estudio de arquitectura donde fueran ellos los jefes.

Aunque en ese momento no eran plenamente conscientes de ello, su principal motivación para formar esa unión fue la emoción del momento. Y allá fueron.

Acordaron hacer un reparto de beneficios al 50/50 y se pusieron a trabajar al 200%.

A las pocas semanas, Armando consiguió su primer cliente para el estudio, a la par que Juan cerraba el segundo contrato. En esos inicios, ambos se emplearon a fondo para sacar el trabajo adelante.

En unos pocos meses, llegaron a su proyecto número 19. ¡Era todo un éxito!

Incluso consiguieron 2 alianzas que les suministraban clientes de forma recurrente, suficiente para que ambos obtuvieran suculentos beneficios, lo bastante atractivos como para renunciar a su empleo anterior con el que habían estado compaginando su nueva empresa de arquitectura.

Desafortunadamente, después de dos años, el tiempo que Juan dedicaba al estudio de arquitectura, y la calidad de su trabajo… comenzaron a deteriorarse.

No es que Armando vigilara lo que Juan hacía a cada momento del día, pero se dio cuenta de algo preocupante: por cada cuatro clientes que él conseguía cerrar, Juan traía uno y, a veces, ninguno.

Más tarde, se enteró de que Juan había leído un libro que defendía trabajar 4 horas a la semana. Aunque eso es otra historia.

Para empeorar las cosas, los clientes en los que se centraba Juan, comenzaron a enviar quejas acerca del trato y Armando tuvo que echar horas extra semana tras semana.

Aun así, cada día 30, como un reloj, Juan no faltaba a su cita para llevarse su 50%.

Cuando Armando trató de llamar la atención a Juan acerca de eso, este se puso a la defensiva y aumentaron las tensiones.

Esa confrontación afectó aún más a la concentración y productividad de Juan… incluso transcurrieron varios meses sin que trajera un solo cliente al estudio.

Armando intenta disolver la sociedad y… sí, Juan se resistió.

¿Por qué debería ceder? Al fin y al cabo, estaba gozando del 50% de los beneficios y viviendo cómodamente con el esfuerzo de su compañero.

Armando, finalmente, tuvo que contratar un abogado y buscar una salida legal para aquella encerrona.

Finalmente, unos meses más tarde, la sociedad se disuelve por completo y, junto con ella, los 15 años de amistad de los dos compañeros.

Tu socio es igual a un matrimonio… he aquí el por qué

Me encanta esta analogía: tu socio es como un matrimonio.

¿Estás preparado para comprometerte?

Y lo es porque, después de que la pasión y la lujuria desaparezcan, este debe sobrevivir a base de sinergias, personalidades compatibles y otros atributos complementarios.

Mis primeros contactos e historias de amigos y conocidos con el mundo empresarial fueron todos alianzas, y todos fracasos miserables.

No es que los socios fueran malas personas, pero la forma de trabajo, valores y visiones no eran compatibles.

Recuerdo que, en una ocasión, uno de los compañeros tenía un trabajo normal en otro estudio y, además, era adicto al pádel. Al final, resultó que el negocio era la número cuatro o cinco en su lista de prioridades. ¿Cómo crees que terminó la historia?

También conozco de primera mano la historia de dos arquitectos en la que, uno de los socios, estaba involucrado en cuatro negocios, además de ese. Eso ponía en una situación extrema a la otra persona y a la propia empresa… ya que, en su caso, sí era la prioridad número 1.

¿Ves el problema?

Te animo a ir a cualquier foro sobre emprendimiento, buscar la palabra “socio”… y encontrarás una avalancha de quejas acerca de empresas que se han deteriorado con los años.

Las diferencias pueden surgir por decenas de factores:

• Un socio quiere especializarse, el otro quiere abrir nichos de mercado.
• Un socio quiere financiación, el otro prefiere hacer “bootstrapping”.
• Un socio quiere disfrutar del dinero que están generando, pero aun así llega tarde a la oficina y se va temprano. El otro, se mata a currar y es ahorrativo.

Créeme, un socio es como un matrimonio: más de la mitad de las veces fracasarán porque las dos personas, sencillamente, no eran compatibles en el largo plazo.

Si de verdad necesitas un socio… empieza por aquí

Todo el mundo dice que debes asociarte con personas que tengan habilidades complementarias a las tuyas.

Es decir:

• Si tienes un perfil muy técnico, deberías asociarte con alguien que se le dé bien el marketing.
• Si se te dan muy bien las personas, e incluso podrías venderle hielo a un esquimal, entonces es buena idea buscar un compañero con un perfil más analítico.
• Etc.

Si bien este es un buen punto de partida para encontrar un socio, lo cierto es que no es suficiente. Para mí, es el equivalente a casarte con la persona que te acabas de encontrar en la cola del supermercado simplemente porque tenga los pechos grandes o porque se de un aire con Brad Pitt.

La realidad es que te quedan por descubrir muchas otras características que determinarán el éxito, o el fracaso, de esa unión.

Pero lo dicho, no me parece un mal punto de partida.

A parte de ese, Laura Ribas ha creado un magnífico video donde ella misma te cuenta cómo tomar la decisión correcta acerca de emprender solo o acompañado:

https://www.youtube.com/watch?v=NkK_qLdfrk4

7 reflexiones necesarias antes de emprender con un socio

A continuación, compartiré contigo una serie de preguntas que debes hacerte antes de formar una unión empresarial. 

Son cuestiones de suma importancia, ya que diferir en determinadas áreas implicará, casi con total seguridad, un rotundo fracaso en el largo plazo:

• ¿Tenéis la misma ética en el trabajo? Es decir, ¿tu compañero es capaz de irse a hacer surf mientras tú te quedas calculando una estructura para llegar a la entrega?
• ¿Tenéis la misma visión, o podrían a competir entre ellas?
• ¿Eres precavido y quieres crecer lentamente mientras que tu socio quiere adueñarse del mundo y hacerlo rápidamente?
• ¿Quieres montar un estudio internacional mientras que tu socio está aquí para pagar las facturas y poco más?
• ¿Tenéis una personalidad similar?
• ¿Eres individualista? ¿Prefieres hacer las cosas a tu manera o eres capaz de trabajar en equipo?
• ¿Confiarías tu vida a esta persona?

El hecho, es que las personas se unen habitualmente por las razones equivocadas. Algunos simplemente no han nacido para emprender y deberían conseguir un empleo por cuenta ajena.

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El caso es que, al igual que el 80% de las PYMES fracasan en sus primeros 5 años (sobre todo porque no nacieron para responder a una necesidad del mercado), la mayoría de las sociedades se forman bajo una falsa premisa: Diversificación del riesgo y el esfuerzo.

Es decir, la mayoría de los socios no buscan la sinergia, lo que quieren es:

• No jugárselo todo ellos a una carta.
• No asumir todo el gasto.
• Trabajar el 50%.
• Y, por supuesto, evitar la posibilidad de admitir que han fracasado sin tener a nadie con quien compartir la responsabilidad.

Así, casi siempre se busca un socio para dividir la carga al 50%.

Pero me temo que la vida no son matemáticas.

Si no se escoge bien, la sociedad se terminará desequilibrando, y eso es lo que genera resentimiento.

¿Pueden funcionar las alianzas con otros socios?

Por supuesto, las alianzas pueden funcionar, al igual que muchos matrimonios funcionan. 

Sin ir más lejos, nuestros amigos de Stepienybarno, Lorenzo y Agnieszka, son un ejemplo de emprendimiento en pareja en el mundo de la arquitectura, concretamente en el ámbito digital.

Otro caso de éxito son los compañeros de Feel like an architect, todo un ejemplo de sinergia y colaboración.

En cualquier caso, si quieres emprender con socios, asegúrate de:

1.- Sentar unas buenas directrices al principio, y que se cumplan.

2.- Y, sobre todo, sé consciente de con quién te estás comprometiendo.

Mucho ojo con este segundo punto, ya que haber pasado las últimas 3 semanas bebiendo con tu compañero de piso de la universidad… podría no ser suficiente para certificar que sois compatibles.

Y es que… ¿Te casarías con alguien 3 semanas después de conocerle?

Esta es la guía más completa que encontrarás en internet para conseguir unas prácticas remuneradas en el ámbito de la arquitectura.

Si estás en los últimos años de carrera y no sabes qué va a pasar después o si, simplemente, buscas tu primer empleo en arquitectura… ¡Presta atención!

Te voy a mostrar los 6 pasos testados que debes seguir para convertirte en practicante de arquitectura.

¿La mejor parte? Que no hará falta que envíes un solo currículum.

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Mi historia personal en los últimos años de escuela

Último año de carrera, me quedaban un par de asignaturas y el PFC. Era el sprint final y, aun así, no podía sacarme de la cabeza una pregunta:

¿Qué carajo voy a hacer cuando acabe?

“Prácticamente no he dado un palo al agua en mi vida” – Pensaba.

Ciertamente, había tenido la suerte de no verme obligado a ser uno de esos valientes que trabajaban mientras estudiaban para poder pagarse la matrícula.

He de decir que sentía (y siento) auténtica admiración por ellos.

Sin embargo, yo, en cierta manera, estaba cómodo siendo un estudiante más.

De vez en cuando iba por clases, estudiaba mucho cuando tocaba… y el resto del tiempo lo perdía o salía de fiesta como una auténtica bestia parda.

Pero todo eso se iba a desvanecer en cuestión de un año… ¿Qué pasaría entonces?

La pregunta que me quitaba el sueño

¿Qué haré a partir de ahora?e

Esa era la que pregunta se volvió habitual en mi mente. Y tomaba distintas formas:

• ¿Cómo voy a meter cabeza en el mundo laboral?
• ¿Debería buscar alguna beca práctica de arquitectura?
• Pfff con la crisis está jodida la cosa, ¿me podrá enchufar alguien?
• No dejo de escuchar que la profesión está peor que nunca. ¿Busco trabajo para estudiantes de arquitectura? ¿o emigro directamente a otro país?

Llevaba varios años desencantado, desmotivado, las razones por las que empecé a estudiar la carrera prácticamente estaban en el olvido ante el panorama que se me presentaba.

Hubo una época en la que me monté un CV (que, en retrospectiva… daba auténtica pena verlo), copié una carta de presentación que encontré en Google y empecé a enviarlos a todas las oferta y estudio que encontré por ahí.

Al cabo de varios meses… esto fue lo que lo que más escuché:

Efectivamente, imaginaba mi CV echo una pelota, paseándose por toda la ciudad como uno de esos matojos que atraviesan el desierto. :'(

Llegué a pensar que, al fin y al cabo, era normal:

• ¡Ni siquiera tenía experiencia! Y la última vez que lo comprobé, la asignatura de proyectos o el PFC no contaban como tal.
• Mi CV era una basura. En esa época no lo veía tan claro. Pero ahora te lo puedo confirmar: daba pena verlo.
• Además, podía estar haciendo mil cosas mal sin saberlo. (Aquí iba bien encaminado, ¡extenderé esto más adelante en este post!)

Estaba seguro de que “la realidad” de aquella época… habría hecho llorar al mismísimo Antonio Gaudí.

Mi nueva realidad – El cambio de paradigma que me llevó a conseguir unas prácticas en arquitectura

Afortunadamente, esa triste historia hace mucho tiempo que dejó de ser mi realidad.

A continuación, te voy a contar exactamente lo que hice para revertir la historia.

Pero el caso es que, cuanto más lo pienso, más claro veo que no dejaba de ser un punto de vista subjetivo que yo tenía acerca de la situación.

Y es que hay algo tengo muy, muy claro:

Siempre habrá oportunidades y un gran futuro para aquellas personas con ilusión, inteligentes y válidas que sepan y quieran generarlas.

Es decir, siempre habrá trabajo para los mejores, para los que tengan ilusión, para los que sepan “generar” esas vacantes  y sobre todo, para los que estén dispuestos a aportar valor a otras personas.

Lo compruebo día tras días, así que no lo dudes nunca. Ni por un momento.

Entonces, la pregunta es directa.

¿Cómo generas oportunidades laborales siendo estudiante o recién titulado?

Hace muchos años que conseguí mis primeras prácticas profesionales en arquitectura.

Aun lo recuerdo bien, vi cómo funcionaba un proyecto en la calle, el papeleo, las facturas, los presupuestos, el olor de la tinta de los planos en la oficina, el tacto del acero en la obra.

En fin, ¡qué recuerdos!

Lo cierto es que no esperaba que todo el mundo fuera tan amable conmigo ni que estuvieran tan dispuestos a compartir su conocimiento.

Solo era un becario en el mundo de la arquitectura… ¡Pero aprendí muchísimo!

Convertirme en practicante de arquitectura fue mi pistoletazo de salida, mis primeros pasitos en el mundo laboral.

Y las conseguí siguiendo un proceso que he ido perfeccionando con el tiempo.

En los últimos meses, he usado como “conejillos de indias” 🙂 a una serie de personas que han llegado a mí a través de este blog.

La mayor parte ha terminado accediendo a una vacante de la misma manera y, finalmente, he dado con un sistema que, sencillamente, funciona.

El que te voy a revelar a continuación.

Si lo sigues paso por paso, en menos de un par de meses estarás dando tus primeros pasos en el mundo laboral y profesional dentro de la arquitectura.

Y ojo, porque no hará falta que envíes un solo portafolio ni que tengas experiencia.

Vamos con los 6 pasos.

Paso 0: Transfórmate en caviar

Si conoces el blog, puede que ya sepas de lo que te estoy hablando.

Y es que hay una diferencia abismal entre ser uno más del montón (ser sal), y ser considerado como el “caviar” de todos los becarios.

Hay tres principios fundamentales que debes conocer para hacer este cambio de paradigma fundamental:

1.- Sé específico.

2.- Perfecciona la búsqueda y preparación previas.

3.- Que te recomienden (¡Quien sea!).

Están todos explicados en profundidad, aquí: La guía definitiva para conseguir empleo como arquitecto, incluso sin tener experiencia. Transfórmate en Caviar >>

 

Paso 1: Elabora una lista de 10 estudios de arquitectura

El primer paso es sencillo.

Genera una lista de 10 empresas, 20 a lo sumo, en las que te gustaría hacer tus prácticas o conseguir tu primer empleo.

A ser posible, que cumplan estos requisitos:

• Que estén cercanos a ti por ubicación.
• Que tengan una plantilla joven (media en torno a los 30 años).
• Que tengan historial de haber contratado anteriormente a practicantes.

Luego, ordénalas por orden de preferencia y anótalas en una hoja de excel que incluya: Nombre, localización, información sobre los empleados, tipos de proyectos, etc..

Para encontrar esas empresas puedes buscar en Google o, mejor aún, en LinkedIn.

LinkedIn es una excelente herramienta que te permite ver los trabajadores y ex-trabajadores de un gran número de empresas e incluso contactar con esas personas.

Si aún no tienes cuenta allí… ¡Ya estás tardando en crearte una!

 

Paso 2: Investiga a tu primera empresa – Empezando por la cola

Una vez que tengas tu listado de empresas, vas a escoger la última de tu lista y a desarrollar solo con ella el resto de los pasos.

¿Por qué empezamos por la que menos te interesa? Porque al principio fallarás.

Primeramente, toca a hacer una investigación primaria.

La meta es la siguiente: tomar consciencia acerca de la empresa y conocerla. Identificar a las personas clave allí, trabajadores, proyectos. En definitiva, tomar contacto con el ecosistema, el entorno y la situación actual que atraviesa la empresa.

Te doy permiso para convertirte en un auténtico topo y cotillear todo lo que quieras.

Para hacer tu investigación, puedes utilizar:

• Perfil de la empresa en LinkedIn.
• Página web.
• RRSS de la empresa: Facebook, Twitter, Instagram, etc.
• Apariciones en prensa.
• Contactar con perfiles individuales de LinkedIn. (Extendido en el paso 4).
• Incluye en tu investigación el ámbito personal y las RRSS de las personas clave de la empresa.

Un pequeño aviso, porque te veo venir: No te saltes este paso.

Conocer el ámbito profesional y personal de la empresa será fundamental en los pasos sucesivos.

Bonus: Descarga la guía para conseguir empleo como arquitecto, incluso sin tener experiencia. Un manual que ha ayudado a centenas de arquitectos a conseguir trabajo. Obtén tu copia aquí.

 

Paso 3: Explora tu red de contactos actual – ¿Tienes alguna conexión?

Créelo o no, tú también tienes una red de contactos.

Lo que pasa es que la estás pasando por alto… tal como hice yo cuando me lié la manta a la cabeza y empecé a enviar CV’s como si no hubiera un mañana.

Y es que, verás… ¿Adivinas qué hace el 95% de la gente al buscar su primer trabajo?

¡Exacto!

Terminan la carrera, montan como pueden su CV y su portafolio para que no dé mucha vergüenza y…

¡Salen felizmente a empapelar la ciudad con su Currículum de arquitecto!

¡Ole, ole y ole ese arquitecto “weno”!

¡Qué felicidad, qué alegría!

Sí, durante 2 semanas. Luego toda esa energía torna en frustración.

Pues eso, a lo que íbamos. Networking. Ni infojobs, ni leches. Net-wor-king.

¡Todos tus contactos clave deben enterarse de lo que estás buscando!

Esto es lo que debes hacer en su lugar:

1.- Explorar tu red de contactos para ver si tienes alguna conexión con la empresa que has investigado. Repasa tus contactos del teléfono, Facebook, LinkedIn y confirma si tú o alguien de tu red de cercana conoce a alguien dentro del estudio. (Esto multiplicará por 100 tus posibilidades de entrar).

*Nota*: De no tenerla, abre una cuenta de LinkedIn, rellena mínimamente tu perfil y comienza a agregar a personas, conocidas y desconocidas dentro de tu ámbito profesional y, concretamente, de los estudios de tu lista.

2.- Busca a personas de tu propia universidad, profesores, asociación de alumnos, compañeros… pregúntales. Es clave que contactes con tus profesores por si conocen a algún trabajador de los estudios de tu lista o a algún otro estudio que necesite ayuda. Te sorprenderás de la cantidad de contactos que tienen los profesores.

Si eres de los que nunca ha cruzado más de 2 palabras con los profesores lo tendrás un poco más difícil pero tranquilo, estoy seguro de que algún cariño te tendrán 😛 e intentarán ayudarte.

En este punto, pueden ocurrir dos cosas:

• Sí tienes una conexión. Estupendo, la idea es ponerte en contacto con una persona dentro del estudio para identificar los desafíos que atraviesan ahora mismo y ver, de manera totalmente amigable y con GANAS DE AYUDARLES A ELLOS, si efectivamente podrías serles de alguna ayuda.
• No tienes una conexión: Avanza al paso 4.

Paso 4: Genera una conexión – Ampliando tu red de contactos de manera estratégica

¿No tienes una conexión? No hay problema. Puedes crearla por ti mismo.

Solo tienes que hacer esto:

1.- Escribe a varios trabajadores o ex-trabajadores de la empresa. Ponte en contacto con ellos para concertar un café, una llamada de teléfono o que respondan a tus preguntas por email. Ese es el orden de prioridad de más a menos efectivo.

Te dejo una plantilla que puedes usar:

Hola Arturo, Te saluda un compañero de la escuela de arquitectura de Granada. Estaba investigando algunas ofertas de trabajo para estudiantes de arquitectura y justamente he visto que tú eres [su puesto] en [empresa]. Estoy en proceso de búsqueda para conseguir unas prácticas en el arquitectura y sería genial poder hacerte 3 o 4 preguntas acerca de tu experiencia en el gremio. ¿Estarías disponible para charlar 10 minutos el martes sobre las 10:00 AM? Me puedo acercar por tu oficina y tomamos un café. También estoy libre el jueves. ¡Muchísimas gracias! – Carlos Montilla PD: imagino que estarás muy ocupado, así que, si es más sencillo para ti… estaría encantado de enviarte las preguntas por email. ¡En cualquier caso gracias de nuevo!

Ten en cuenta que si escribes a 5 personas no vas a recibir 5 respuestas.

Puedes dar por hecho que la gente está a sus cosas y que la mayoría no responderá a tu mensaje. Simplemente inténtalo de nuevo hasta recibir respuesta.

2.- Haz tus preguntas y toma nota. Preguntas:

• ¿Que 2-3 desafíos crees que tiene la empresa actualmente? / ¿En qué partes del desarrollo de X podríais necesitar una mano extra?
• ¿Qué harías tú en mi lugar para acceder a un puesto de trabajo similar al tuyo? ¿Crees que existe la posibilidad de que ser contratado de prácticas allí?
• Además de tener un gran historial… ¿Qué crees que haría destacar a alguien que quisiera acceder a X estudio?
• ¿Qué es lo más difícil acerca de encontrar a alguien en prácticas? Por ejemplo, ¿Cómo terminarías esta frase?: “Es realmente difícil hoy en día encontrar un practicante que pueda realmente hacer […]”

3.- Mantén el contacto cada 2-3 semanas. La idea es que mantengas la relación con esa persona aportándole valor cada X tiempo. He hablado acerca de cómo hacer esto aquí: Cómo conseguir trabajo de arquitecto en 28 días: Caso de estudio >>

Ojo: No estamos pidiendo trabajo en ningún momento. Eso sería una enorme falta de respeto hacia tu contacto. Por ahora solo estamos tratando de averiguar cómo podemos encajar nosotros allí y, además, comenzar a crear contactos profesionales. Nada más (¡Y nada menos!).

Meta: identificar específicamente las áreas o proyectos donde podamos aportar valor a la empresa en concreto.

Paso 5: Elabora tu CV y portafolio – ¡Opcional!

Este paso es opcional.

Sí, has leído bien, opcional.

En el mejor de los casos… generarás tanto interés que ni siquiera hará falta que envíes tu CV o tu portafolio, y simplemente entrarás a discutir cómo vas a ayudarles.

Es más, un indicador de que las cosas no van demasiado bien sería que te dijeran el típico:

“Envíanos tu CV y ya nos pondremos en contacto contigo”

Si te dicen eso… deberían encenderse todas las alarmas.

En cualquier caso, nunca está de más tener el CV preparado y, en su caso, un portafolio si lo crees conveniente.

Para estos documentos, seré breve:

1.- CV. Haz una lista de tus habilidades y encájalas con las necesidades del estudio. Luego, monta un CV que deje de manifiesto que puedes dar solución a uno o varios de sus problemas. Aquí tienes cómo crear el CV de arquitecto perfecto.

2.- Portafolio. Todo lo que necesitas conocer está aquí: Cómo hacer un portafolio de arquitectura: La guía definitiva >>

Además, a continuación puedes descargar más de una centena de páginas de portafolios exitosos, solo tienes que introducir tu correo electrónico para recibirlos en tu email:

Paso 6: Contacta directamente con el jefe del estudio

“Dame ocho horas para cortar un árbol y pasaré las primeras seis afilando el hacha” ― Abraham Lincoln

Puedes estar satisfecho, porque el gran Lincoln estaría orgulloso de ti.

Sí, hasta ahora has estado afilando el hacha, engrasando la motosierra, afinando tu puntería, preparando el tiro, sacando punta al lápiz, desoxidando la guadaña, amartillando el rifl…

Vale vale, ya paro. Pero captas la idea, ¿verdad?

Es hora de disparar.

Y la cosa no puede ser más sencilla.

Vas a contactar con el dueño del estudio y a presentarte como la solución a parte de sus problemas.

Usando los elementos clave que hayas identificado en los pasos anteriores (desafíos que tienen, cualidades tendría un gran candidato, qué consideran complicado de encontrar, etc.), redactarás un email con la siguiente estructura.

Plantilla para contactar con el dueño

Asunto: Soy Carlos – Estoy interesado en charlar sobre [Estudio de arquitectura] Hola Arturo, Me llamo Carlos y quisiera saber si existe la posibilidad de realizar unas prácticas en el departamento [X] de su estudio. Soy estudiante de [tu carrera] y tras charlar con [tu contacto], me ha interesado mucho trabajar para ustedes. Fruto de mi investigación, me he dado cuenta de que encajaría muy bien en lo que respecta a: 1.- Reto 1 fruto de tu investigación. (Ayudar con los proyectos “Z” e “Y”) 2.- Reto 2 fruto de tu investigación. (Implementar metodología BIM?) 3.- Reto 3 fruto de tu investigación. (Mejorar sensiblemente la calidad de la infografía?) Particularmente, podría ayudar a [XYZ] y a [HJK]. [Aquí cuenta lo más relevante para demostrar que puedes solucionar esos retos sin escribir una biblia]. Para demostrarlo, he montado una pequeña web con mi CV, mi portafolio y mis referencias: http://about.me/tunombre Mi disponibilidad es desde mañana, día [X], hasta el final de [Mes donde termina tu disponibilidad]. Estaré encantado de presentarme con más detalle en una reunión en su oficina durante esta semana o la siguiente. ¿Tiene 15 minutos para tomar un café el jueves a las 16:00? Un cordial saludo – Carlos Montilla. PD: Si lo prefiere, también podemos hablar por teléfono en cualquier momento. Mi Tlfn: 555-555-555

Nunca cometas este error eliminatorio

Ojo, en ningún momento debes cometer el error de decir que estás dispuesto a trabajar gratis.

Eso transmite debilidad, falta de conocimiento y activará todas sus alarmas.

Saltará a la vista que estás desesperado y que vienes a chupar del bote más que otra cosa, que van a tener que dedicarte un tiempo precioso y que, prácticamente, van a tener que hacer de niñera contigo.

¡Y eso no lo quiere NADIE!

Básicamente te habrás pasado una semana afilando la sierra para terminar haciendo… esto:

Sin embargo, algo que sí puedes hacer y que funciona extremadamente bien para conseguir unas prácticas remuneradas, es decir algo así en la reunión o la llamada:

“Estaría dispuesto a  trabajar gratis durante 2 semanas para demostrar de lo que soy capaz, comprender cómo funcionáis y adaptarme a los procesos de su empresa. Así no estarían arriesgando nada conmigo y podrán decidir más adelante si me quieren en su equipo.”

Con esta frase puedes poner el pie en la puerta, eliminas el riesgo que experimenta cualquiera a la hora de contratar y, además, lleva implícito que, al cabo de 2 semanas, deben comenzar a remunerarte.

¡Me encanta esa frase!

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Y… ¿Qué viene después?

Después, se pueden dar 3 opciones.

1.- Aceptan entrevistarse contigo. Acude a la cita / llamada y saca lo mejor de ti. Enfoca la conversación en cómo les vas a ser de utilidad a ellos. En este punto es donde puedes usar buena parte de tu investigación del paso 2. Si das con una tecla que toque una fibra emocional de la persona… lo tendrás hecho.

2.- No responden. Si no contestan, reflota tu mensaje al cabo de los 2-3 días enviando este correo:

Hola Arturo, Soy Carlos, arquitecto. Sólo quería reflotar este email al principio de tu bandeja de entrada pues imagino que recibirás centenas de correos a diario. No me gustaría que se haya extraviado entre todos tus mails. Gracias —————– [AQUÍ ESTARÍA EL MENSAJE ORIGINAL]

Si tampoco responden a esta… prueba el último cartucho: llama directamente y comenta por teléfono las ideas de tu email inicial.

3.- No responden o lo hacen con una negativa. En ese caso, pasa a la siguiente empresa de tu lista. Tienes un mínimo de 10 balas. Con esta metodología alguna de ellas va a dar en el blanco.

Te lo garantizo. Así que no te desanimes.

¿Es infalible este sistema para conseguir unas prácticas en arquitectura?

En una palabra: Sí. Es infalible.

Quizás no a la primera, quizás no a la segunda. Principalmente porque las primeras veces que lo pongas en prácticas serás bastante inexperto.

Pero, si lo llevas a cabo el número de veces suficiente… no me cabe duda de que conseguirás tu objetivo.

Así que ve a por ello y te deseo lo mejor, ¡arquitecto!

Y ahora… ¿Estás preparado para tomar acción?

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Haz click en el botón de bajo e introduce tu e-mail para conocer los próximos pasos y conseguir tus prácticas remuneradas en arquitectura. Así aprenderás a negociar tu salario de arquitecto y el resto de condiciones de trabajo.

¡SÍ, QUIERO CONOCER LOS PRÓXIMOS PASOS!

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¡Muchísimas gracias!

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No es un secreto que el portafolio de arquitectura es una de las piezas clave de la búsqueda de empleo en arquitectura.

Pero… ¿Cómo crearlos y usarlos de la manera correcta?

Para que un portafolio de arquitecto funcione, necesitas conocer multitud de estrategias que no se suelen enseñar en la escuela de arquitectura: cómo documentar tu trabajo, qué proyectos incluir, qué clase de portfolios necesitas (¡sí, hay varios tipos!) o cómo luce en realidad un portafolio exitoso.

En esta guía voy a mostrarte todo lo que necesitas para crear un gran portfolio como profesional de la arquitectura.

Bonus: Descarga un checklist gratuito, que te mostrará los 10 aspectos más importantes acerca de un portafolio de arquitectura explicados en esta guía. Obtén tu copia aquí.

 

La guía completa para crear un portafolio de arquitectura

Estás en el punto de partida. Cuando hagas clic en cualquier de los capítulos de abajo, saltarás directamente al capítulo en cuestión.

Están dispuestos por orden lineal, de manera que van de lo más genérico a lo más concreto.

Es decir, comienza con los capítulos más básicos y, luego, pasa a las técnicas más avanzadas. Incluyendo ejemplos portafolios exitosos hacia el final de la guía.

En cualquier caso… ¡Elige el capítulo que prefieras y ve a por ello!

• Capítulo 1: Cómo un gran portfolio puede disparar tus posibilidades de conseguir trabajo de arquitecto.
• Capítulo 2: Documentando tu trabajo: El método para recopilar tus mejores proyectos y tenerlos accesibles cuando lo necesites.
• Capítulo 3: Cómo garantizar el máximo impacto positivo con múltiples portafolios.
• Capítulo 4: The two-page portfolio: Cómo impresionar a cualquier empresa con 2 páginas.
• Capítulo 5: El Portafolio STAR: La estrategia para destacar entre cientos de candidatos
• Capítulo 6: El portafolio para entrevistas: Cómo crear un documento que te consiga puestos de trabajo
• Capítulo 7: Cómo sacar el máximo partido de un portfolio en formato, impresión y métodos de envío.
• Capítulo 8: Casos de éxito de portafolios de arquitectos. Ejemplos.

Por cierto, debo pedirte algo. Como te podrás imaginar… me ha llevado decenas de horas, y muchos años de experiencias, recopilar toda esta información y regalártela organizada de esta manera. 

Si te parece interesante o útil esta guía para hacer portafolios de arquitectura, por favor,  compártela con tus amigos en Facebook. Será tu granito de arena para contribuir a que este proyecto online siga avanzando 🙂 

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¡Muchas gracias… y vamos con la guía!

 

Capítulo 1: Cómo un gran portfolio puede disparar tus posibilidades de conseguir trabajo de arquitecto

Existen multitud de razones diferentes por las que te podría interesar crear un portafolio de arquitectura, desde conseguir unas prácticas, impresionar a un profesor o acceder a una beca.

Sin embargo, el objetivo más importante y el foco principal de esta guía estará enfocado a conseguir un empleo en una empresa de arquitectura. Ya sea grande o pequeña.

La clave de un portafolio de arquitectura es compartir tu trabajo, experiencia y talentos en un documento compacto que pueda comprender rápidamente el gerente de recursos humanos.

Independientemente de tus fortalezas y debilidades, el objetivo de tu portafolio es comunicar de manera efectiva lo que puedes hacer por la empresa y cómo vas a ayudarles.

¡Y no hay una respuesta acertada para todos! Por eso…

Debes conocer a tu objetivo

La clave para crear un portafolio exitoso y, finalmente, obtener el trabajo que deseas es conocer a tu objetivo.

Por ejemplo, el estudio de arquitectura al que estás aplicando.

Cuanta más información pueda recopilar sobre tu objetivo, mejor.

• ¿De qué tipo y escala son sus proyectos típicos?
• ¿Hacen trabajo local o internacional?
• ¿Qué software usan?

Por esta razón, lo ideal es que contactes con los empleados actuales para conocer sus problemas y desafíos reales para presentarte como la solución a los mismo por medio de tu candidatura.

Por cierto, no temas contactar directamente con la oficina y preguntar qué están buscando en los candidatos. Por ejemplo, podrías preguntar:

• ¿Cómo funciona el proceso de contratación?
• ¿Quién revisará mi portafolio?
• ¿Cómo sería el candidato ideal?

Ponte en su pellejo, si quieres contratar a alguien y un candidato te llama para hacerte esas preguntas… ¿Te lo tomarías a mal?

¡Por supuesto que no! Todo lo contrario.

 

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Capítulo 2: Documentando tu trabajo: El método para recopilar tus mejores proyectos y tenerlos accesibles cuando lo necesites.

El primer paso en la preparación de tu portafolio no tiene nada que ver con el formato o el diseño de las páginas.

Lo más importante es tener bien controlado y archivado TODO tu trabajo.

Incluyendo cualquier trabajo que hayas creado en forma física: maquetas, ilustraciones, fotos y / o dibujos.

Archivar y respaldar todo tu trabajo tan pronto como esté terminado… debe convertirse en un hábito en tu carrera.

No esperes un mes para fotografiar tu maqueta, siempre se verá mejor recién terminada.

Y, por cierto, aunque pienses que no lo necesitarás en el futuro… ¡Haz una copia!

Aún recuerdo cómo a uno de mis compañeros le robaron el portátil durante su PFC.  Y con ello se llevaron todo su trabajo del cuatrimestre.

Perdió meses de trabajo. ¡No pongas todos tus huevos en una misma cesta!

Hacer un CTRL+C y CTRL+V toma solamente algunos segundos. Sin duda merece la pena por la paz mental que te traerá 🙂

Recomiendo tener tres métodos simultáneos para archivar tu trabajo. Esto puede parecer excesivo, pero ten en cuenta que si pierdes esos datos… se habrán ido para siempre.

1. Disco duro del portátil

Este es el método de almacenamiento predeterminado. Simplemente guardar  los archivos en el ordenador.

En cualquier caso, esto no es suficiente.

Los discos duros fallan más que una escopeta de feria. Así que no te quedes ahí… implementa también los siguientes métodos porque no te llevarán más que un par de clics.

2. Disco duro externo

Las capacidades de almacenamiento de los discos duros aumentan cada año, mientras que el costo disminuye. Un disco duro de 2 TB se puede comprar hoy por el mismo precio que uno de un 1 TB el año pasado.

Por esta razón, debes utilizar los discos duros casi como si fueran libros en una estantería.

3. En la nube

Problemas de privacidad y teorías conspiratorias aparte… el almacenamiento en la nube es una excelente opción.

Es cierto, si Trump se hiciera con el parking en altura que hiciste en tu PFC… quizás se desembocaría la 3ª guerra mundial. Pero tienes que ser valiente y correr el riesgo ya que los beneficios son aún mayores.

Las propias empresas de «cloud storage» (Google, Dropbox, etc…) se encargan de hacer copias de seguridad de la información.

Además, tendrás acceso a toda la información en cualquier momento y en cualquier lugar.

Todo esto es extremadamente valioso.

Así que, aun a riesgo de que se filtren tus renders en Wikileaks, crea ahora mismo una cuenta en Google o Dropbox y sube todo tu trabajo a la nube.

 

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Capítulo 3: Cómo garantizar el máximo impacto positivo con múltiples portafolios.

Cuando busques trabajo, te recomiendo que NO utilices un portafolio estándar para todas las fases y puestos de trabajo.

Debes crear un portafolio específico y único para cada etapa del proceso de solicitud.

Esto implica algo más trabajo, pero mucho menos del que estás pensando ahora mismo. Ya que no estoy hablando de hacer un rediseño completo.

Lo que harás será crear un «portafolio maestro». Un documento que bien podría tener cientos de páginas e incluir una representación exhaustiva de todo tu trabajo.

Una vez que tengas ese portafolio, es muy fácil copiar, eliminar y reordenar los proyectos relevantes al puesto que estés aplicando.

¿Es esto realmente necesario?

La respuesta corta: sí.

Si quieres un buen trabajo de arquitecto, debes estar dispuesto a anticipar el trabajo duro.

5 razones por las que te recomiendo tener varios portafolios:

1. Te diferencia de la competencia

La mayoría solo tiene un portafolio online, que incluye todo su trabajo. Decenas e incluso centenas de páginas.

Luego, envían cientos de correos electrónicos con el enlace a «tropecientos» estudios de arquitectura.

Y luego, al cabo de los meses, se preguntan por qué nadie les contesta.

…Almas de cántaro…

Este enfoque de bombardear con candidaturas espontáneas rara vez funciona. Y, de funcionar, 9 de cada 10 veces terminarás en un trabajo que no te guste o en el que no encajes bien.

2. Focalizas tu candidatura

Ser muy específico es esencial para ser considerado como un candidato serio para el puesto.

Debes alinear tu portafolio, no solo con el rol que está aplicando sino también con la etapa correcta en el proceso de solicitud.

3. Proporciona la cantidad correcta de información

Como te explicaré a continuación, el primer portafolio que envíes en una candidatura será muy diferente del que usarías en una entrevista de trabajo.

Es una manera perfecta de generar interés por ti, aplicando la dosis perfecta de información dependiendo del momento. Desde la candidatura online hasta la entrevista en persona y, finalmente, a la oferta de trabajo.

4. Puedes vender tus mejores cualidades

Usar varios portafolios de arquitectura, te permite enfatizar tu experiencia y habilidades en paquetes separados fácilmente comprensibles.

Recuerda: las habilidades que vendas a tu empleador deben alinearse con las necesidades del trabajo.

5. Evita la confusión

Lo peor que te puede pasar es que el gerente de recursos humanos no entienda lo que puedes aportar a la empresa.

Al igual que los párrafos o capítulos de un libro, un portafolio discreto le permitirá comprender con mayor facilidad quién eres y qué puedes hacer por ellos.

¿Cuáles son los múltiples portafolios?

Durante el proceso completo de candidatura a un puesto de trabajo, existen tres tipos de portafolios que te recomiendo preparar.

• The Two-Page Portfolio [Candidatura inicial / primer contacto]
• The STAR Portfolio [Para impresionar en una entrevista]
• El Portafolio para Entrevistas [Es el portafolio estándar]

 

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Capítulo 4: The two-page portfolio: Cómo impresionar a cualquier empresa con 2 páginas.

Semanalmente, recibo docenas de solicitudes de arquitectos y recién graduados para revisar sus portafolios. Aunque disfruto haciéndolo y me encanta ver su trabajo, me he dado cuenta de que muy a menudo pierden el norte.

Es de lo más habitual ver cómo derrochan tiempo y energía estresándose por cosas sin importancia.

• ¿Mi tamaño de letra demasiado grande?
• ¿Qué tipografía debería usar?
• ¿Hay suficiente espacio en blanco?
• etc…

En lugar de preocuparte por si la página debe tener bordes de 1/2″ o 1/4″, deberías hacerte las preguntas adecuadas. Que son estas:

• ¿Necesito este proyecto en mi portafolio de arquitectura?
• ¿Cómo ayuda a mi candidatura?
• ¿Cómo puedo hacer que este proyecto sea más relevante para el puesto?

En la fase de aplicación a un puesto de trabajo, aconsejo a los candidatos que utilicen el portafolio de arquitectura más corto posible.

Con diferencia, lo más efectivo es enviar un CV y un portafolio de 2 páginas.

La mayoría de la gente se sorprende al escuchar esto, ya que un portafolio típico ronda las 20-40 páginas.

Para aclarar esto… ahora mismo solo estoy hablando de la presentación inicial a una empresa de arquitectura, no de la fase de entrevista personal. (Para ella, recomiendo un portafolio tradicional completo).

Pero para ese primer contacto, un CV acompañado de un portafolio de dos páginas es perfecto.

Por cierto, al igual que el CV, es simplemente una instantánea de tus mejores habilidades y trabajos.

Pautas generales para preparar un portafolio de 2 páginas:

• ¿Qué hiciste TÚ?

Los proyectos de arquitectura suelen ser un trabajo en equipo, pero es fundamental que muestres con claridad qué trabajo y problemas resolviste en tu(s) proyecto(s).

No pongas solo el render profesional de 2000€ del proyecto de la torre en que trabajaste, para terminar diciendo que ayudaste a distribuir el parking.

Sí, puedes poner el súper render para dar algo de contexto, pero céntrate principalmente en mostrar en qué trabajaste TÚ.

Esto puede no ser tan glamuroso, pero es la clave para contar tu propia historia.

Igualmente, sea cual sea el problema que resolviste, debes vincularlo con las funciones y responsabilidades requeridas que buscan para el puesto de trabajo.

• Que sea breve

Cuando reviso candidaturas, puede que dedique un minuto en total a escanear el Curriculum del arquitecto. Incluso he hablado con reclutadores que me contaron que 1 minuto suele ser el máximo.

Los arquitectos suelen estar muy ocupados y en la mayoría de los estudios no suele existir una persona encargada exclusivamente de esto. Así que sé breve e intenta que el peso de tus archivos sea lo menor posible.

• Pónselo fácil al encargado de contratarte

Un consejo: no uses un portafolio online y lo envíes a 200 empresas. No funcionará.

Algo así no es nada personalizado y a la gente nos gusta sentirnos que nos tratan de manera especial. Sí, a los jefes también les gusta.

Adjunta un PDF a tus correos pues todo son ventajas. (Controlas el formato, no dependes de que el host esté caído, incluso puede que la empresa tenga capadas ciertas webs o que estas tengan desagradables pop-ups que incomoden al lector).

• Que sea simple

No uses tipografías extrañas y no hagas buscar a la gente tu información de contacto. Email y teléfono es suficiente.

 

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Capítulo 5: El Portafolio STAR: La estrategia para destacar entre cientos de candidatos

Mientras que, para un primer contacto, el portafolio de 2 páginas es la solución perfecta… para posteriores fases del proceso de contratación será mejor usar un portafolio diferente.

Aquí es donde entra en acción el «STAR portfolio».

Por si no estás al tanto, STAR significa: Situación, Tarea, Acción y Resultado.

El Portafolio STAR es un documento breve que contiene una serie de puntos clave e imágenes sobre cómo lidiaste con un problema específico en un proyecto específico.

Cuenta con alrededor de diez o más páginas e irá junto con tu portafolio completo, el cual llevarás a la entrevista de trabajo.

¿De qué hablar en este portafolio?

Invierte algo de tiempo pensando algún problema que surgiese en el desarrollo de un proyecto y cómo lo resolviste. ¡Y escoge uno con final feliz!

Por qué debes usar un portafolio STAR

• Te desmarca del resto

Cualquier candidato que acude a una entrevista lleva lo mismo: un CV y un portafolio. Si quieres destacar, debes hacer algo diferente.

• Demuestra que comprendes las necesidades del puesto

Conocer el puesto de trabajo que pretendes ocupar es esencial.

Intenta alinear el problema del que hables en tu portafolio STAR con el rol al que estés aplicando.

Cuando adaptas este suplemento específicamente al puesto, usando ejemplos tangibles, queda muy claro por qué eres el candidato perfecto.

• Demuestra que eres pro-activo y te pone en control de la conversación

La mayoría de candidatos va a una entrevista en modo pasivo, es decir, van a responder preguntas.

Contrastando con ellos, tú llevarás material para demostrar cómo vas a ayudarles y podrás llevar parte de la entrevista a tu especialidad.

Además, cuando tú hablas… es prácticamente imposible que el entrevistador pueda centrarse en buscar errores en tu CV o portafolio.

• Enfatiza tus habilidades comunicativas y organizativas

El propósito principal de este portafolio es demostrar cómo afrontaste un problema en particular, y cómo lo resolviste.

Te recomiendo que escojas una situación que puedas exprimir al máximo.

• ¿Implicaba a varias personas y tuviste que delegar tareas?
• ¿Necesitaste entrar en contacto directo con el cliente o con otros profesionales?
• ¿Tuviste que lidiar con presión o un deadline exigente?

Ejemplo de STAR Portfolio

Voy a explicar este portafolio con un proyecto de ejemplo.

Es un ejemplo técnico, así que ten en cuenta que tú debes incluir imágenes de apoyo y una explicación verbal para acompañarlo durante la entrevista.

Los puntos serán solo un esquema para que puedas seguir un guion y contar tu historia fácilmente.

Es conveniente tratarlo al principio de la entrevista para demostrar que traes algo diferente, pero no pases más de 10-15 minutos con esto.

Recuerda:

Situación: Define el contexto del proyecto.

Tarea: ¿Qué requería la situación? ¿Qué necesitabas hacer?

Acción: ¿Qué hiciste?

Resultado: ¿Qué ocurrió finalmente?

Vayamos con el ejemplo…

---

Proyecto: Torre Meyer.

Descripción: Edificio de oficinas de 10.000 m2.

Presupuesto: 12.000.000 €

Localidad: Singapur

Situación

• Durante la construcción del proyecto realicé unas comprobaciones estructurales cuyos datos se debían incorporar al proyecto.
• Las conclusiones no estaban alineadas con las de los ingenieros, había diferencias muy significativas.
• La construcción no se podía retrasar, supondría grandes costos no previstos.

Tarea

• Identificar dónde y por qué existían tales diferencias entre los cálculos.
• Elaborar un plan de acción para resolver las variaciones.
• Identificar qué era inamovible y qué era flexible acorde al proceso de construcción.

Acción

• Creé un modelo paramétrico 3D para comparar y crear una representación visual de las diferencias en ambos cálculos.
• Me reuní con consultores y contratistas para determinar qué podría ser alterado de manera realista dadas las limitaciones.
• Desarrollé opciones de diseño para resolver los cambios con un impacto visual mínimo.

Resultado

• Se determinó que las diferencias eran debidas a un asentamiento de un edificio colindante.
• La ciudad aceptó el nuevo diseño teniendo en cuenta las nuevas alturas de acera y las pendientes de drenaje que fueron incorporadas.
• Se proyectaron nuevos niveles que mantuvieron el cronograma y presupuesto del proyecto con cambios mínimos.

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Al exponer claramente el problema en este simple ejemplo, el entrevistador puede ver cómo priorizaste, delegaste, coordinaste y organizaste las tareas en el entorno de un proyecto.

Son habilidades importante que busca cualquier empresa.

Un portafolio complementario como este impresionará a cualquier entrevistador.

Invierte un poco de tiempo en ello y recogerás los dividendos el resto de tus días.

 

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Capítulo 6: El portfolio para entrevistas: Cómo crear un documento que te consiga puestos de trabajo

Este portafolio es lo que la mayoría tiene en mente cuando se refieren a su portafolio de arquitectura: una recopilación de su mejor y más relevante trabajo.

Por cierto, ten presente que el portafolio es solo una herramienta más de marketing personal, y no debe suponer el centro de tu candidatura.

En última instancia, el entrevistador estará pensando: «¿Puedo trabajar con esta persona?».

Hay ciertos perfiles y habilidades que buscan los estudios de arquitectura, que no tienen nada que ver con el portafolio… y que serán tanto o más importantes que tus antiguos proyectos.

A continuación, abordaré problemas comunes y a evitar al preparar tu portafolio de arquitectura:

• Encajarlo con la empresa

Este aspecto de particular importancia si la mayoría de tu portafolio consiste en trabajos de la universidad.

Mostrar proyectos poco tradicionales puede ser una distracción para algunas empresas.

No significa que debas centrarte en tus proyectos más conservadores y aburridos, pero ten en cuenta que las oficinas tradicionales tendrán problemas para ver cómo tu ópera flotante construida con cartón reciclado se traducirá en un trabajo del día a día en su despacho.

En cualquier caso, independientemente de los proyectos que selecciones, todos deberían enfatizar tu profesionalidad, habilidades de diseño, trabajo en equipo y capacidad de comunicación.

• Personalización

Como ya sabes, tener un portafolio único con el que aplicar a todas las empresas no es una buena idea.

Tampoco tienes que hacer un rediseño completo.

Lo que harás será crear un «portafolio maestro». Un documento que bien podría tener cientos de páginas e incluir una representación exhaustiva de todo tu trabajo.

Una vez que tengas ese portafolio, es muy fácil copiar, eliminar y reordenar los proyectos relevantes al puesto que estés aplicando.

• Longitud del portafolio

¿Cuantas páginas debe tener un portafolio para entrevistas? Tantas como sean necesarias, y ni una más.

No hay una longitud establecida, pero no tiene inconveniente incluir más proyectos de los que crees que discutirás en la entrevista.

La única advertencia que te haría es que los proyectos deben estar en orden de mayor a menor relevancia. Este es el orden que funciona mejor para una entrevista.

Además, incluye una tabla de contenidos para encontrarlo rápidamente si te preguntan por un proyecto en concreto que mencionabas en tu CV.

• Presentando tu portafolio de arquitecto

Ya que has investigado a fondo, tu trabajo consiste en dirigir al entrevistador a los proyectos que consideres más relevantes para el puesto que estás solicitando… y pivotar por el camino.

Por ejemplo, si ves que después de hablar sobre un proyecto de viviendas él reacciona diciendo que buscan a alguien con experiencia comercial… esas es tu oportunidad de dirigirte a otro proyecto en el que tuvieras un trabajo más comercial.

• ¿Deberías incluir documentación de construcción en tu portafolio?

Los documentos típicos relativos a los proyectos de ejecución no son lo más ideal para un portafolio.

Incluirlos o no dependerá del rol al que estés aplicando. Si estás tratando de obtener un trabajo que requiere experiencia en la producción de documentos de construcción, entonces inclúyelos sí o sí.

En ese caso, hazlo en formato digital mediante un CD o USB.

• Define claramente tu rol en cada proyecto

Como todos sabemos, la arquitectura es una profesión colaborativa.

Dependiendo del tamaño del proyecto, puede haber desde unos pocos miembros hasta cientos.

Es muy importante definir claramente tu rol en el proyecto. ¿Qué hiciste TÚ?

Esta es una pregunta simple, pero muy a menudo no se responde en el portafolio de los candidatos ni en los documentos de solicitud.

Ten en cuenta que mostrar un proyecto no explica lo que TÚ hiciste.

A menudo, los candidatos quieren impresionar al director de recursos humanos con imágenes perfectas.

Sin embargo, mostrar algo que realmente hiciste y explicarlo claramente… ¡Es mucho más valioso!

 

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Capítulo 7: Cómo sacar el máximo partido de un portfolio en formato, impresión y métodos de envío.

Tan importante es tener múltiples portafolios como presentarlos de la manera adecuada.

A continuación, te cuento cómo debes actuar en cuanto al formato, impresión y método de envío de tu portafolio de arquitectura.

Formato

Los formatos de página típicos en Europa y América son A4 (8.268” x 11.693”) y A3 (11.693” x 16.535”). 

En USA, un formato similar es el Letter (11×17)

Te recomiendo formatear tu portafolio con una de esas dimensiones.

Impresión

Cualquier imprenta te proporcionará un encuadernado de tipo espiral o equivalente por unos pocos euros.

También, puedes crear un portafolio de cada proyecto y unirlos todos en un gran cuaderno que te permita «despiezarlo» rápidamente, ordenarlos y volver a armarlo.

Esto, por ejemplo, te permite mover los proyectos más relevantes para ponerlos al principio.

Si vas a imprimir en otro país ten cuidado: debes conocer la pequeña diferencia entre los tamaños de papel A4 y Letter. Si te despistas podrías cortar parte del portafolio y que los datos de contacto aparezcan a medias en todas las páginas.

Envío

En general, hay tres formas de enviar tu portafolio:

1. Correo electrónico

En esta opción, te recomiendo enviar tu carta de presentación como texto del email, y adjuntar tu CV y portafolio por separado.

Consejo: Evita poner una introducción en el asunto del correo.

Ejemplo:

(Mal): Asunto: Hola soy Carlos Montilla. Por favor miren mi CV y portafolio.

(Bien): Asunto: Carlos Montilla, CV y Portafolio.

2. Envío a través de un formulario web

Algunas empresas de arquitectura, sobre todo las más grandes, te permitirán enviar tu CV a través de su web.

Para esta situación, generalmente hay dos opciones:

1. Adjuntar un PDF: Si te dan la opción… esta es la ideal. Sube tu PDF y andando.

2. Un cuadro de solo texto: Suele ser un cuadro de texto sin formato que no permite el formateo. Por lo tanto, debes tener tu carta de presentación y currículum formateados para HTML y texto plano para que sean legibles por esas plataformas.

3. Copia impresa por correo

Por lo general, no recomiendo enviar copias impresas salvo casos muy excepcionales.

Sin embargo, si quieres hacerlo por algún motivo especial… no olvides imprimir tu carta de presentación (firmada), currículum vitae y portafolio en papel blanco de calidad.

También sería interesante enviarlo en un sobre a prueba de agua para reducir la posibilidad de que se moje y llegue en mal estado.

 

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Capítulo 8: Casos de éxito de portafolio de arquitectos. Ejemplos.

Echar un vistazo a algunos portafolios de calidad puede ayudarte a coger inspiración y, sin duda, aclarará gran parte de las ideas expuestas en este post.

Actualmente, tengo en mi poder cientos (¿miles?) de portafolios de arquitectura profesionales y espectaculares.

He incluido algunos a continuación, pero no era práctico subir demasiadas fotos a un artículo ya que no se pueden exponer en buena calidad… eso ralentizaría mucho la velocidad de carga de esta página.

Por eso, he creado una selección de 186 páginas con portafolios que considero son excelentes ejemplos de composición, contenido y claridad.

Introduce a continuación tu nombre y el la dirección de correo electrónico donde quieres recibir el PDF.

Los ejemplos que encontrarás son algunos de los mejores portafolios que he visto y explican claramente proyectos a través de una amplia variedad de métodos.

Además, en lugar de solo proporcionar algunas partes reducidas, he incluido grandes secciones de cada portafolio. Esto te ayudará a ver la intención general de cada proyecto y cómo cuentan una historia.

 

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¿Cómo puedo aplicar todo esto a mi portafolio?

He creado un checklist gratuito, paso a paso, que podrás usar para aplicar rápidamente la información más importante de este artículo a tu portafolio de arquitecto.

La checklist contiene los 10 aspectos más importantes de este megapost…

… además de estrategias súper accionables que puedes usar desde hoy para mejorar tu portafolio de arquitectura y mejorar las posibilidades de conseguir un buen trabajo.

Introduce tu nombre y correo electrónico a continuación para descargar la checklist:

¿Qué perfil buscan los estudios de arquitectura hoy en día?

Muchos de vosotros me habéis lanzado esta cuestión vía email, así que hoy te voy a dar la solución.

Soy consciente de que la inmensa mayoría espera una respuesta del tipo: “Aprende a usar Revit” o “Haz un máster en rehabilitación”, pero me temo que la respuesta real a esta cuestión poco tiene que ver con nada de eso, ni tan siquiera con los años de experiencia.

Si quieres saber qué buscan en realidad los estudios de arquitectura en el siglo XXI, sigue leyendo.

Bonus: Descarga los 7 pasos probados para conseguir UN BUEN TRABAJO como arquitecto, incluso SIN tener experiencia. Un manual que ha ayudado a centenas de arquitectos a conseguir un empleo de calidad y bien remunerado. Obtén tu copia aquí.

¿Qué están haciendo mal los candidatos a puestos de trabajo?

Y cuando digo qué están haciendo mal… me refiero sobre todo a mí mismo. Porque yo estuve allí.

Es decir, hace algunos años acaba de terminar la carrera y me encontraba en búsqueda activa de empleo.

Estaba ilusionado, me había preparado para ello (o eso pensaba), había hecho decenas de cursos para complementar mi formación, enviaba de 50 a 100 currículums de arquitectura diarios y estaba convencido de que, en poco tiempo, estaría trabajando en una gran empresa.

¿Qué ocurrió en realidad?

Que estuve chocando contra un muro invisible unas 50 – 100 veces al día.

Y lo más curioso es que, aunque no había impacto físico… empezó a dolerme la cabeza.

Empecé a dudar de mí mismo, de mis recursos como profesional, empecé a maldecir a la sociedad, a la crisis, a las empresas y al mismísimo presidente del gobierno.

Por algún motivo que desconocía, sencillamente las empresas no mostraban el mínimo interés en mí. La inmensa mayoría de ellas, ni siquiera se dignaba a contestarme. Aun cuando había personalizado la candidatura para ellos (Echando la vuelta atrás, lo que yo llamaba “personalizar”, era un insulto a su inteligencia… pero bueno, era joven e iluso 🙂 ).

Mi realidad se convirtió en un cóctel de autocompadecimiento y odio a la sociedad: nadie me daba una oportunidad porque no tenía experiencia y, como no conseguía experiencia, nadie me daba una oportunidad. Estaba en un callejón sin salida.

Pero… ¿Era este el problema real?

Lo que nadie te cuenta acerca de los años de experiencia

Estaba convencido de que el problema era que no tenía experiencia, pero, además, había algo que no encajaba.

Cuando me paraba a mirar a mi alrededor…

• Veía parados de larga duración.
• Veía sueldos de arquitectos miserables.
• Veía personas con 20 años de experiencia que tampoco conseguían trabajo.
• Incluso me di cuenta de que algunos de los programas informáticos que se usaban en todos los estudios hacía 5 años… ahora ni siquiera se comercializaban.

Incluso, en una ocasión en que paré en seco a reflexionar… me di cuenta de que las infografías y renders 3D… me parecían antiguallas en comparación con los tours de realidad virtual por viviendas que había visto en Youtube.

Cosas como esta:

Todo ello apuntaba a que la experiencia, quizás, tampoco era la solución.

O… ¿Acaso serviría de algo hoy en día tener 20 años de experiencia dibujando con rotring y paralex?

Pues, curiosamente, hay miles de personas que tienen un iphone y siguen trabajando con una máquina de escribir. Entiéndase la metáfora 😉

El caso es que, visto lo visto, podría llegar a ser un peligro especializarse en renders, pues tenían los días contados en pro de la realidad virtual… y lo peor es que, después de la VR vendría otra cosa que, una vez más, me dejaría obsoleto.

Una conclusión es clara: Tal como avanzan la tecnología y el mundo en general… los «años de experiencia» en temas concretos han perdido una parte enorme de su importancia.

Entonces… ¿Qué diablos debes hacer? ¿Qué buscan en realidad las empresas?

¿Qué quieren todas las empresas en realidad?

Creo que hay una respuesta bastante indiscutible a esta pregunta. Es la siguiente:

Las empresas buscan resultados, soluciones a sus problemas concretos.

Esto, que resulta trivial cuando te paras a pensar, solo lo he visto con claridad cuando he estado “al otro lado” de la partida. Es decir, cuando he sido el estudio de arquitectura en busca de trabajadores.

No negaré que el manejo de Software (Cype, 3D Studio, Revit, etc…) es un problema a resolver en algunos estudios, y por lo tanto una necesidad para ellos.

Pero estas necesidades varían enormemente de empresa en empresa, por lo que sería absurdo generalizar.

Sin embargo, sí que existen ciertas habilidades «intemporales», que cualquier negocio valoraría tener en su equipo…

¡Te hablo de ellas a continuación!

El perfil perfecto del trabajador del futuro

Tú ya sabes que los programas informáticos pasarán de moda, que quedarán obsoletos y con ellos parte de tus habilidades.

Eso es inevitable.

Pero entonces, si ningún programa en concreto será infalible para siempre, ¿Qué habilidades debes adquirir sí o sí?

La respuesta es: aquellas habilidades y aptitudes fundamentales para las relaciones humanas, esas que NUNCA perderán valor con el paso de los años.

Estás habilidades son invaluables para cualquier empresa que busque su propio crecimiento. Y te daré una pista: todas quieren crecer.

¿A qué habilidades me refiero?

6 Habilidades clave del trabajador del Siglo XXI

Cada una de las siguientes habilidades daría para escribir un post completo de 2.000 palabras.

Así que, por hoy, me limitaré a presentártelas para que seas tú mismo quien profundice en aquellas que más te interesen.

Esas habilidades son:

0.- Versatilidad. Es la habilidad fundamental a la que he tratado de apuntar a lo largo de todo el artículo. Como te comentaba en este post, ha llegado el momento de comprender que 10 años de experiencia NO son 10 años de ventaja. En el mejor de los casos, tener tanta experiencia suele ser lo mismo que tener 1 o 2 años de experiencia repetidos 10 veces.

En el peor… esos 10 años no valen para nada.

Estarás de acuerdo conmigo en que el argumento toma aún más peso en un mundo que avanza a pasos de auténtico gigante. Es decir, un mundo donde lo que valía antes ya NO vale ahora.

“Las empresas deben contratar por capacidades y potencial de aprendizaje, no por experiencia. Vale más alguien inteligente, curioso y creativo que alguien con 10 años de experiencia.” – Laszlo Bock, Jefe de RRHH de Google.

«En el mundo actual, las empresas buscarán Versatile Learning Animals» – Raúl Sánchez, fundador de Knowmads.

1.- Inteligencia Emocional. Este concepto lleva años difundiéndose como la pólvora. Y, en palabras de su creador, no es más que:

La habilidad para percibir, asimilar, comprender y regular las propias emociones y la de los demás promoviendo un crecimiento emocional e intelectual, utilizando esta información para guiar nuestra forma de pensar y nuestro comportamiento”. – Daniel Goleman.

2.- Comunicación y escucha. «Tengo habilidades de comunicación», es algo que se dice en un CV de manera estándar. 

Pero de poco vale enumerar una serie de habilidades en un CV sin dar pruebas o hechos que en realidad hablen por sí solas.

Respecto a la necesidad de las habilidades comunicativas, hay una frase que me gusta especialmente:

“La naturaleza nos dio dos ojos, dos orejas y una boca para que pudiéramos observar y escuchar el doble de lo que hablamos” – Epícteto

 3.- Trabajo en equipo.  Aparte de tus habilidades de comunicación. Puedo afirmar, sin mucho miedo a equivocarme, que en tu CV se puede leer siguiente frase: “…trabajo en equipo…”. Todo el mundo puede decir eso, y de hecho todos lo dicen. Pero, ¿Cómo podrías demostrármelo?

¿Te soy sincero? Yo no soy un buen trabajador en equipo y soy consciente de que es una de mis debilidades en las que debo trabajar.

Si tú puedes demostrarme que sí lo eres… ya tendrías mucho ganado.

“Yo hago lo que usted no puede y usted hace lo que yo no puedo. Juntos podemos hacer grandes cosas” – Madre Teresa de Calcuta

“Trabajar en equipo no es una virtud, es una elección consciente y voluntaria que surge construyendo lazos de confianza basados en la vulnerabilidad humana que muestran los integrantes del equipo, antes sus errores, temores y dificultades” – Patrick Lencioni

3.- Liderazgo. Vaya por delante que existen muchos tipos de liderazgo. Pero si hay una definición que me gusta especialmente, es esta:

Si tus acciones inspiran a otros a soñar más, a aprender más, hacer más y ser más, eres un líder. – John Quincy Adams

5.- Negociación y ventas. Quizás no te hayas parado nunca a reflexionar sobre la importancia de estas habilidades… pero son imprescindibles. PARA TODOS.

A parte de para ayudar a vender más a otras personas, debes tener en cuenta que, por lo pronto, tú mismo eres un producto con patas. Así que, si no sabes cómo venderte, difícilmente serás capaz de conseguir un buen empleo.

La diplomacia es el arte de conseguir que los demás hagan con gusto lo que uno desea que hagan. – Dale Carnegie

El cambio de paradigma para encontrar tu lugar en el mercado de trabajo

Dicho todo ello, te voy a contar cómo dar respuesta a algunas preguntas que sé que te atormentan. Preguntas como: 

• ¿Dónde deberías irte a vivir?
• ¿Qué programas informáticos o disciplinas debes estudiar?
• ¿Es mejor entrar una empresa grande o una pequeña?
• ¿Leer libros de arquitectura o hacer un máster?

Como ya intuyes… la cosa no es blanca o negra. Pero, aun así, te voy a contar lo que yo haría:

Te animo a que hagas un cambio de paradigma y pases de ser reactivo a proactivo. O, dicho de otra manera, en lugar de reaccionar y tratar de adaptarte a lo que se lleva… Escoge tú, decide qué quieres hacer de tu vida y cómo prefieres desarrollar tu carrera. En base a lo que te guste y te ilusione.

Es posible que te suene engreído, pero hay algo que siempre digo. Y es que tanto aquí en España como en Chile, como en Japón… hay y habrá siempre trabajo para los «buenos». Entendiendo estos como los que están dispuestos a destacar, a aportar valor y a salir adelante en las circunstancias que les toque vivir.

Partiendo de esa base, si por ejemplo lo que a ti te ilusiona es formar parte de un estudio de arquitectura modesto, en el que tengas voz y voto y que además esté en España… que nada te lo impida. Te aseguro que puedes conseguirlo. 

Si, por otro lado, te hace ilusión especializarte y trabajar en REVIT… entonces HAZLO, especialízate. Más tarde, encuentra una empresa que pague bien a las personas con tus habilidades.

Pero el primer paso es que decidas tú.  Elige lo que tú quieres hacer. No vivas la vida de nadie.

Por supuesto, centra tu formación en conseguir las «Habilidades Clave» de las que te he hablado. Las necesitarás siempre. Y, como extra, estudia aquellas habilidades técnicas por las que te sientas verdaderamente atraído.

Si te conviertes en una persona que cuente con las «Habilidades Clave», te será sencillo encontrar empresas que quieran contar contigo.

Pero, sobre todo:

No permitas que alguien te diga qué es lo que más se lleva, o en qué tipo de empresas tienes más futuro.

Toma las riendas de tu vida.

¿Te gustaría conseguir un puesto de trabajo o… mejorar el que ya tienes?

A continuación, te dejo un regalo.

Se trata de una guía de 17 páginas en PDF, que te enseñará cómo negociar para conseguir un empleo en el mundo de la arquitectura, incluso sin tener experiencia.

Haz click en el enlace de bajo e introduce tu e-mail para acceder a la guía PDF completa para encontrar trabajo de arquitecto, incluso sin tener experiencia.

Introduce tu nombre y tu email a continuación para descargar “Los 7 pasos probados para conseguir UN BUEN TRABAJO como arquitecto, ¡Incluso SIN tener experiencia!”

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*Nota sobre el post*: El contenido de este artículo es fundamentalmente aplicable a estudios de tamaño mediano / pequeño. Las empresas enormes se mueven lentamente, necesitan procesos, sistemas y filtros para ganar tiempo. Así que descartan sin piedad a cientos de candidatos. Eso hace que estas ideas no apliquen tan bien en esas empresas, que sí que filtran según programas informáticos o experiencia concreta en un programa técnico. 

En cualquiera caso, para el 99% de empresas restantes… las de tamaño medio-bajo,  lo que se comenta en el post es 100% aplicable.**